Muchas veces la discriminación hacia las mujeres se concreta, legitima y promueve a través del lenguaje; y las campañas electorales suelen ser un escenario de esta realidad. El uso de estereotipos y prejuicios de género para minimizar o atacar a la persona con la que se compite, o incluso para establecer un vínculo con la ciudadanía, suele ser muy común y nos sobresalta sólo cuando lo dicho es escandaloso o linda con el insulto.  

La Constitución prohíbe la discriminación hacia las mujeres y es la Ley de Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hombres (Ley 28983) la que proscribe el lenguaje  sexista, es decir aquel que alimenta  los prejuicios y mantiene la noción de inferioridad o superioridad de cualquiera de los sexos así como los roles estereotipados de género. En el Perú jurídicamente no hay margen de interpretación, las expresiones sexistas están proscritas. 

En ese marco deben ser rechazados los ataques o cuestionamientos que se hacen a las mujeres políticas por su sexualidad, su cuerpo o el ejercicio de la maternidad; no solo porque son intrascendentes al momento de evaluar sus capacidades o sus propuestas, sino porque con ellos se consolida la idea de que la valoración de las mujeres se relaciona a si responden o no a un estereotipo de belleza socialmente impuesto, o a un modelo de mujer cuya sexualidad está claramente relacionada al matrimonio y a la reproducción.

Asimismo debe rechazarse el uso de expresiones que evidencien desprecio, subordinación o ridiculización de lo femenino, independientemente a quien o quienes estén dirigidas. Es muy común cuestionar al oponente con calificativos femeninos o atribuyéndole características o atributos históricamente relacionados a las mujeres, como si en sí mismos fueran negativos. Con ello solo se perpetúa la discriminación sexual.

Finalmente, debe prestarse atención y rechazar enérgicamente aquellas expresiones que reflejan la interconexión entre diversas formas de discriminación. Es muy común que la discriminación por sexo y género hacia las mujeres esté unida de manera indivisible a otros factores como su raza, origen étnico, discapacidad, salud, edad, clase, orientación sexual o identidad de género; y ello se suele trasmitir también a través del lenguaje.

En ese sentido, resulta importante visibilizar el rol de vigilancia y denuncia que desarrolla la sociedad civil en este tema, y saludar la iniciativa de la Asociación Civil Transparencia de impulsar una campaña por un trato con respeto y sin discriminación en estas elecciones. Sin duda, su herramienta #OjoalaCampaña dará mucho que hablar.

Apostemos por la igualdad y el respeto de las diferencias. En esta campaña fortalezcamos la democracia, también a través del lenguaje.  

En el Perú, sólo algunos ejemplos: 

 “Las damas siempre dicen que no y terminan diciendo que si”. Marco Tulio Gutierrez en la revocatoria de Susana Villarán. 

 "Hay una gorda que anda por ahí diciendo que hay un gobernante de los ricos, cuando ella se ha paseado en la campaña electoral bañándose en la piscina de los ricos" Armando Villanueva respecto a Lourdes Flores.

 “es fuerte, decidido y con pantalones” Fredy Otárola respecto a Ollanta Humala.

 “ella ha sabido destacar porque es joven y guapa, pero no ha destacado en la defensa de un tema en particular” Pedro Tenorio respecto a Verónika Mendoza. 

 “la premier, lesbiana y “evangélica” Ana Jara es una vergüenza para el Perú” José Linares respecto a Ana Jara.

 “Mira, Lourdes es mi amiga, la quiero mucho, pero Keiko me gusta más, es más luchadora. Además es madre, es una mujer realizada” Madeleine Osterling respecto a Lourdes Flores.

Y ojo, no es un problema sólo nacional, ni se trata de derechas o izquierdas.

 “las leyes son como las mujeres, están para violarlas” José Manuel Castelao del Partido Popular de España, quien era Presidente del Consejo General de la Ciudadanía en el Exterior. 

 “Qué asambleístas guapísimas que tenemos. Corcho, hay que aumentarles el sueldo porque no tuvieron plata para comprar suficiente tela y todas con una minifalda. Dios mío… me contaron que tienen unas piernas impresionantes”. Rafael Correa, Presidente de Ecuador.

 “Si no puede satisfacer a su marido qué le hace pensar que puede satisfacer a los americanos “ Donald Trump (candidato republicano en los Estados Unidos) respecto a Hillary Clinton.